Si la adversidad puede ayudarnos a ser más conscientes, qué sucede cuando la situación va bien?
Pueden ser forzados a despertar, en cuyo caso tienen que esperar a que las cosas a su alrededor se vuelvan caóticas o que la muerte se les acerque – o pueden abrazar voluntariamente el despertar, lo cual están haciendo justo ahora (conjuntamente con la mayoría de ustedes que leen estas palabras). En otras palabras, ustedes eligen la presencia. Eligen mirar a su alrededor al cielo y a los árboles y a las flores, a respirar y a tomar este momento para disfrutarlo, habitar este momento, habitar su cuerpo en este momento.
Cuando notan que su mente acapara su atención en pensamientos inútiles, pueden conscientemente recuperar esa atención respirando, sintiendo el campo de energía en su cuerpo interno, sintiendo que están vivos. Siempre es cuestión de elección. Pueden elegir el momento presente en lugar de perderse en preocupaciones futuras o pasadas y así sucesivamente. Eligen regresar a la simplicidad de este momento y sentirse vivos.
Ahora, para poder elegir necesitan tener un cierto nivel de conciencia. De ahí pueden elegir estar presentes. Finalmente, por supuesto, no son ustedes los que eligen estar presentes. No son ustedes los que eligen estar conscientes, porque no hay ustedes y la conciencia. Ustedes son la conciencia. Así que aunque desde un punto de vista externo (o propio) parezca que ustedes están eligiendo la presencia, no es así como es.
Lo que ocurre es que la conciencia viene a través de ustedes, pero parece que ustedes la estuvieran eligiendo. Ustedes no tienen conciencia, ustedes son conciencia. Yo soy conciencia. Porque si tengo conciencia, entonces ¿quién soy yo? ¿Alguna entidad sin conciencia que tiene conciencia?
Pueden decir lo mismo de la vida. La gente piensa “voy a perder mi vida”. Bien, entonces debe haber un yo que puede perder la vida – pero sin vida, ¿quién es ese yo que debe tener una vida y que puede perder la vida? Yo no tengo una vida. Yo soy la vida. Yo soy una expresión de la vida. No hay ‘mi’ separado de la vida. Y si no puedo tenerla, no puedo perderla
Así que, cuando las cosas van bien también hay una oportunidad para elegir la presencia y mientras más elijan la presencia, menos necesitan que el desastre los fuerce a la presencia. Si viniera el desastre, también está bien, porque entonces intensificará realmente su presencia. La forma en que lidien con ello será mucho más fácil que lo que lo sería en un estado no iluminado.
© copyright 2008-2016. Eckhart Tolle . Todos los derechos reservados. http://www.eckharttolle.com/
Traducción: Fara González
Difusión: El Manantial del Caduceo en la Era del Ahora
http://www.manantialcaduceo.com.ar/libros.htm
https://www.facebook.com/ManantialCaduceo
Pueden ser forzados a despertar, en cuyo caso tienen que esperar a que las cosas a su alrededor se vuelvan caóticas o que la muerte se les acerque – o pueden abrazar voluntariamente el despertar, lo cual están haciendo justo ahora (conjuntamente con la mayoría de ustedes que leen estas palabras). En otras palabras, ustedes eligen la presencia. Eligen mirar a su alrededor al cielo y a los árboles y a las flores, a respirar y a tomar este momento para disfrutarlo, habitar este momento, habitar su cuerpo en este momento.
Cuando notan que su mente acapara su atención en pensamientos inútiles, pueden conscientemente recuperar esa atención respirando, sintiendo el campo de energía en su cuerpo interno, sintiendo que están vivos. Siempre es cuestión de elección. Pueden elegir el momento presente en lugar de perderse en preocupaciones futuras o pasadas y así sucesivamente. Eligen regresar a la simplicidad de este momento y sentirse vivos.
Ahora, para poder elegir necesitan tener un cierto nivel de conciencia. De ahí pueden elegir estar presentes. Finalmente, por supuesto, no son ustedes los que eligen estar presentes. No son ustedes los que eligen estar conscientes, porque no hay ustedes y la conciencia. Ustedes son la conciencia. Así que aunque desde un punto de vista externo (o propio) parezca que ustedes están eligiendo la presencia, no es así como es.
Lo que ocurre es que la conciencia viene a través de ustedes, pero parece que ustedes la estuvieran eligiendo. Ustedes no tienen conciencia, ustedes son conciencia. Yo soy conciencia. Porque si tengo conciencia, entonces ¿quién soy yo? ¿Alguna entidad sin conciencia que tiene conciencia?
Pueden decir lo mismo de la vida. La gente piensa “voy a perder mi vida”. Bien, entonces debe haber un yo que puede perder la vida – pero sin vida, ¿quién es ese yo que debe tener una vida y que puede perder la vida? Yo no tengo una vida. Yo soy la vida. Yo soy una expresión de la vida. No hay ‘mi’ separado de la vida. Y si no puedo tenerla, no puedo perderla
Así que, cuando las cosas van bien también hay una oportunidad para elegir la presencia y mientras más elijan la presencia, menos necesitan que el desastre los fuerce a la presencia. Si viniera el desastre, también está bien, porque entonces intensificará realmente su presencia. La forma en que lidien con ello será mucho más fácil que lo que lo sería en un estado no iluminado.
© copyright 2008-2016. Eckhart Tolle . Todos los derechos reservados. http://www.eckharttolle.com/
Traducción: Fara González
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Blog dedicado al alma.
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